“Esas reuniones sí se sostuvieron”, reconoció Keiderling.
La encargada de negocios de la embajada
de Estados Unidos en Venezuela, Kelly Keiderling, admitió que mantuvo
reuniones con distintos sectores de la sociedad civil aunque aseguró que
no se trató de actos de conspiración contra el gobierno del presidente
Nicolás Maduro. “Esas reuniones sí se sostuvieron”, reconoció
Keiderling.
El presidente Maduro presentó como evidencia un video con fotografías que demuestran que Keiderling, junto a dos diplomáticos estadounidenses más, se reunieron con sectores de la ultraderecha venezolana para desestabilizar al país.
Keiderling confesó su abierta injerencia en los asuntos internos de Venezuela. No solo reconoció que el contenido del video presentado como evidencia de su viaje al Estado Bolívar es veraz, sino que confirmó que este tipo de reuniones las sostuvo “en cada rincón de Venezuela”.
Además, en relación al contenido expuesto en el video que pone en evidencia a los tres diplomáticos, Keirderling confesó que sí se reunió con miembros de sindicatos de Sidor y que por "cortesía y seriedad de nuestro oficio pedimos una reunión con el gobernador del estado Bolívar, Francisco Rangel Gómez, las cuales no pudieron llevarse a cabo por compromisos del mismo".
La funcionaria detalló que en cada uno de los viajes al interior del país se solicitó una entrevista con el gobernador y el alcalde que correspondiese.
El Gobierno de Venezuela rechazó categóricamente las declaraciones de la funcionaria, a través de un comunicado emitido por el ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela, en el que manifiesta que “estas declaraciones son una confesión de la abierta injerencia en los asuntos internos de Venezuela, por lo que la funcionaria fue declarada como persona no grata”.
Keirderling confirmó que este miércoles saldrá del país tras la expulsión que hiciera el presidente Nicolás Maduro el pasado lunes.
Las excusas de Keirderling responden al mismo discurso de la diplomacia y administración estadounidense, queriendo hacer ver que sus intereses son la lucha por el narcotráfico y el terrorismo. Sin embargo, los pueblos de Nuestra América, los pueblos soberanos ya no se comen el cuento de que el país del norte tiene fines altruistas en sus acciones alrededor del mundo.
La acción tomada por el gobierno venezolano responde a la defensa de la soberanía de nuestro pueblo y desenmascara las políticas hegemónicas de Estados Unidos, visibilizando sus políticas neocoloniales, siempre generando planes desestabilizadores, como lo ha hecho históricamente a través de técnicas de magnicidio, acaparamiento de productos de consumo masivo para generar escasez y sabotajes al sistema eléctrico, para posicionarse militarmente dentro y fuera de la región con más recursos naturales; petróleo, gas, agua, minerales estratégicos, alimentación y biodiversidad.
El presidente Maduro presentó como evidencia un video con fotografías que demuestran que Keiderling, junto a dos diplomáticos estadounidenses más, se reunieron con sectores de la ultraderecha venezolana para desestabilizar al país.
Keiderling confesó su abierta injerencia en los asuntos internos de Venezuela. No solo reconoció que el contenido del video presentado como evidencia de su viaje al Estado Bolívar es veraz, sino que confirmó que este tipo de reuniones las sostuvo “en cada rincón de Venezuela”.
Además, en relación al contenido expuesto en el video que pone en evidencia a los tres diplomáticos, Keirderling confesó que sí se reunió con miembros de sindicatos de Sidor y que por "cortesía y seriedad de nuestro oficio pedimos una reunión con el gobernador del estado Bolívar, Francisco Rangel Gómez, las cuales no pudieron llevarse a cabo por compromisos del mismo".
La funcionaria detalló que en cada uno de los viajes al interior del país se solicitó una entrevista con el gobernador y el alcalde que correspondiese.
El Gobierno de Venezuela rechazó categóricamente las declaraciones de la funcionaria, a través de un comunicado emitido por el ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela, en el que manifiesta que “estas declaraciones son una confesión de la abierta injerencia en los asuntos internos de Venezuela, por lo que la funcionaria fue declarada como persona no grata”.
Keirderling confirmó que este miércoles saldrá del país tras la expulsión que hiciera el presidente Nicolás Maduro el pasado lunes.
Las excusas de Keirderling responden al mismo discurso de la diplomacia y administración estadounidense, queriendo hacer ver que sus intereses son la lucha por el narcotráfico y el terrorismo. Sin embargo, los pueblos de Nuestra América, los pueblos soberanos ya no se comen el cuento de que el país del norte tiene fines altruistas en sus acciones alrededor del mundo.
La acción tomada por el gobierno venezolano responde a la defensa de la soberanía de nuestro pueblo y desenmascara las políticas hegemónicas de Estados Unidos, visibilizando sus políticas neocoloniales, siempre generando planes desestabilizadores, como lo ha hecho históricamente a través de técnicas de magnicidio, acaparamiento de productos de consumo masivo para generar escasez y sabotajes al sistema eléctrico, para posicionarse militarmente dentro y fuera de la región con más recursos naturales; petróleo, gas, agua, minerales estratégicos, alimentación y biodiversidad.
No hay comentarios :
Publicar un comentario