Dalvin Abreu una Cara Luchadora
Durante un trabajo de impermeabilización en las cercanías de Chacao, Dalvin Abreu contó su historia, esa que comienza cada día a las 5:00 am, cuando sale de su casa en Catia la Mar, estado Vargas, para hacer uso del transporte público que le permite llegar a su trabajo en Caracas a las 7:00am.
Este luchador es un joven de 30 años que contra de todo pronóstico,
optó por demostrar, alzar la voz y decirle a los demás que sí se puede y
que las limitaciones provienen del interior de cada una de las
personas.
Dalvin tuvo un altercado hace once años con unos maleantes que para robarlo, le dispararon en su pierna izquierda, siendo necesaria una amputación de la mitad de su miembro inferior.
Nos contó lo duro que fue para él los primeros meses pero que sin
embargo, el hecho no fue motivo para decaer y que por el contrario, solo
fue un obstáculo que tuvo que superar para crecer. Dice que el apoyo de
su familia y algunos amigos fue de gran ayuda para superar este hecho y
seguir luchando día a día.
Ha trabajado “en todo” y actualmente se desempeña en la construcción y
la impermeabilización de espacios. “Me gusta lo que hago”, aseguró.
Dijo que al principio “fue difícil”, pero que sus hijos y su familia son su mayor motivación.
Asegura que su mayor recompensa es, al final de la jornada, llegar a
su hogar y jugar con sus cuatro hijos: “Con la ayuda de mi familia y
algunos amigos, salí adelante y bueno, ‘pa’ lante es pa’ ya y pa’ tras
ni pa’ coger impulso’”.
Este joven expresó que no entiende como hay personas en la calle sin
limitaciones físicas que prefieren pedir dinero, en vez de ganárselo.
“He visto muchas personas que están ‘completas’, tienen sus partes donde
es y lo que hacen es pedir real y están robando y pendientes de
quitarle a uno lo que con mucho sudor se gana”.
Con sus hijos como motor principal, Dalvin confesó que ellos son “lo
primero en lo que pienso al despertar” y que todo lo que hace es para
que estudien y “no lleven una mala vida”.
“Este no es un trabajo fácil. Bato pega, pinto, pego cerámica … pero a mí me gusta mi trabajo. Yo soy una persona que piensa salir adelante como deberían hacerlo todos esos muchachos. La mayor recompensa es cuando llego a mi casa y mi hijos se ponen a jugar conmigo”, relató.
Foto: José Luis Altuve/ Noticias24
Foto: José Luis Altuve/ Noticias24
Foto: José Luis Altuve/ Noticias24
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