En el marco de la política nacional de
seguridad y convivencia ciudadana del Gobierno Nacional, en la zona de frontera
se adelantan acciones operativas encaminadas a contrarrestar la
comercialización ilegal de mercancías de contrabando, logrando incautar dos
millonarios cargamentos de licor y motores.
Durante operativos de control aduanero
ejecutados por personal de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc), fueron
decomisadas tres mil unidades de cerveza y cerca de cincuenta unidades de
motores y autopartes para vehículos pesados procedente del extranjero, valuados
comercialmente en cerca de cincuenta millones de pesos.
En un primer caso en el sector del Anillo Vial, trocha El
Italiano que comunica la ciudad venezolana de Ureña con Cúcuta, uniformados de
la Policía Fiscal y Aduanera (Polfa) interceptaron un camión tipo estacas conducido
por un hombre de 22 años de edad, residente en el barrio La Libertad de Cúcuta,
quien sin aportar la documentación establecida por las autoridades aduaneras
colombianas transportaba 1.771 kilogramos de autopartes para vehículos pesados
y livianos.
Al registrar la carga se contabilizaron 21 motores para
vehículo pesado y chatarra de autopartes consistente en nueve cajas mecánicas,
diez cajas de dirección, tres troques traseros pequeños y tres troques delanteros
pequeños de procedencia extranjera.
De acuerdo con las informaciones que se tienen frente al
tráfico ilegal de autopartes, los motores remanufacturados listos para su uso,
serían llevados hacia el interior del país, especialmente la ciudad de Bogotá,
donde su costo comercial por unidad estaría entre los $15 y $20 millones.
LO AGARRAN CON CERVEZA VENEZOLANA
Entre tanto, en la trocha “Los Micos” que comunica el
Corregimiento San Faustino de Cúcuta con el municipio de El Zulia, fue
interceptado un vehículo Ford, conducido por un hombre de 31 años, residente en
el barrio Comuneros, quien manifestó ser el propietario del cargamento de tres
mil unidades de cerveza de contrabando.
Al verificar la procedencia del licor en botella, se
conoció que habría ingresado por un paso no habilitado ubicado en la zona
limítrofe que comunica a San Faustino con Venezuela y sería llevado hacia la localidad
nortesantandereana de El Zulia.
En ambos casos se estableció la ausencia de documentos
que acreditaran el legal ingreso de las mercancías al territorio aduanero
nacional, por lo cual fueron dejadas a disposición de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales
(DIAN), por no encontrarse amparados en una declaración de importación, factura
de nacionalización o planilla de envío.
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