Mediante un extenso video, grabado el año pasado en la Cárcel Nacional Modelo de Barranquilla y publicado este domingo 30 de agosto por el portal aporrea.org, el excapitán del Ejército Nacional colombiano, Adolfo Enrique Guevara Cantillo, alias "101", describe con pelos y señales lo que significó para él cumplir en el vecino país la doble función de efectivo armado regular y la de efectivo paramilitar de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
Guevara Cantillo, quien fuese hasta 2004 jefe de inteligencia del Gaula en el departamento de Magdalena (grupo élite del Ejército colombiano, cuya función era combatir la extorsión y el secuestro), se desempeñaba al mismo tiempo como lugarteniente principal del jefe paramilitar "Jorge 40".
Este exfuncionario, a través de un relato contundente, explica que no solo contó con el apoyo y con la protección de los altos mandos militares colombianos, como por ejemplo el que recibió de parte del general Mario Montoya, sino que también habría recibido órdenes del propio expresidente Álvaro Uribe Vélez para cometer una serie de homicidios. Según cuenta, existe una íntima, impune y eficiente relación entre las fuerzas armadas del Estado y los ejércitos del crimen organizado de la extrema derecha.
De Uribe y de sus demás jefes no solo habría recibido órdenes de cometer ejecuciones extrajudiciales, sino también habría coordinado con ellos la puesta en marcha de espeluznantes "falsos positivos" y el asesinato de dirigentes políticos.
Pero dejemos que sea el propio excapitán Guevara Cantillo quien nos cuente su experiencia en este mundo de delincuencia institucionalizada. Todos los detalles en el vídeo adjunto.
FUENTE / La Iguana.
Guevara Cantillo, quien fuese hasta 2004 jefe de inteligencia del Gaula en el departamento de Magdalena (grupo élite del Ejército colombiano, cuya función era combatir la extorsión y el secuestro), se desempeñaba al mismo tiempo como lugarteniente principal del jefe paramilitar "Jorge 40".
Este exfuncionario, a través de un relato contundente, explica que no solo contó con el apoyo y con la protección de los altos mandos militares colombianos, como por ejemplo el que recibió de parte del general Mario Montoya, sino que también habría recibido órdenes del propio expresidente Álvaro Uribe Vélez para cometer una serie de homicidios. Según cuenta, existe una íntima, impune y eficiente relación entre las fuerzas armadas del Estado y los ejércitos del crimen organizado de la extrema derecha.
De Uribe y de sus demás jefes no solo habría recibido órdenes de cometer ejecuciones extrajudiciales, sino también habría coordinado con ellos la puesta en marcha de espeluznantes "falsos positivos" y el asesinato de dirigentes políticos.Pero dejemos que sea el propio excapitán Guevara Cantillo quien nos cuente su experiencia en este mundo de delincuencia institucionalizada. Todos los detalles en el vídeo adjunto.
FUENTE / La Iguana.
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