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jueves, 19 de marzo de 2015

Banqueros y corruptos criollos protegidos por Estados Unidos

Si usted cataloga como tremendos hampones a Al Capone y a los Yakuza (la mafia japonesa), lea este breve artículo sobre banqueros mafiosos venezolanos que robaron al país sin pistola y sin mucho faramalleo. Cualquier personaje icónico de la mafia es un simple aprendiz ante estos delincuentes que viven en Miami protegidos por los Estados Unidos.

Eligio y su combo

Eligio Cedeño comenzó su carrera financiera con la compañía Cedel. Dicha empresa estaba encargada de traficar bonos y títulos de valores provenientes de las instituciones del Estado luego de la crisis bancaria del año 94. Se comenzó a hacer rico gracias al corretaje malsano de la devaluación.
Eligio Cedeño
Su actividad hamponil fue creciendo rápidamente, convirtiéndose pocos años después en el principal accionista de Banco Canarias, Banpro, Banco Confederado y Bolívar Banco.
Las mafiosas habilidades de Cedeño (y de toda la estirpe quiebrabancos) consistieron en saltarse los controles más elementales del sistema cambiario. Así se volvió banquero: lavando, traficando y saqueando petrodólares a diestra y siniestra.
El caso MicroStar (2007), por el cual fue imputado, consistió en la solicitud de 2.227.450 dólares para supuestamente traer "equipos de computación". Todo ese dinero se lo embolsilló, desviando la atención de Cadivi a través de sus bancos que, a su vez, justificaban otras operaciones de importación con el mismo dinero y viceversa: la famosa "sobrefacturación cíclica" patentada por el delincuente. No importó ni un teclado con esas divisas, pero en el papel había traído 10 mil alfombritas para ratón.
Pero Eligio no actuaba solo. Días antes de que la jueza Afiuni facilitara su escape (mediante soborno milmillonario) hacia Miami, el Gobierno bolivariano anunció la intervención de sietes bancos (Canarias, Banpro, Bolívar, Banco Central, Banco Real, Baninvest y Banco Confederado) por presentar graves irregularidades en cuanto a sus fondos y recientes transacciones con otras entidades. 
Los bancos de Eligio Cedeño fueron los que más resaltaron por la enorme estafa perpetrada hacia la nación. Y aunque él se encontraba privado de libertad, eso no fue inconveniente para dirigir las mafiosas operaciones financieras durante los años 2008-2009.
La estrategia de calentar la arremetida contra el país por parte de estos delincuentes encuentra piso en el proyecto de sanciones desarrollado por Marco Rubio, Ileana Ros-Lehtinen y Robert Menéndez
Álvaro Gorrín Ramos, Carlos Ponce Fuentes, Luis Gustavo Kowalski y Pablo Botella Carretero (directivos del Canarias), Juan Fernández Lara (directivo de Bolívar Banco), José Antonio Pernalete, Rafael Alberto Molina (directivos de Banpro), Rubén Osuna y Gonzalo Ernesto Vásquez (directivos del Banco Confederado) fueron los encargados de la maniobra. Una vez culminada se fugaron a Miami junto a Cedeño.
¿Cómo se ejecutó el desfalco a la nación? El Banco Canarias le vendió el 99% de sus acciones, valoradas en 5 mil 50 millones de bolívares (Bs. 5.050.000.000,00), a Banpro. Resulta que éste último no tenía capacidad financiera para comprar tan gigantesca cantidad de activos, por lo cual fueron desplazados de forma ilegal los depósitos de Bolívar Banco y Confederado hacia Banpro con el objetivo de liquidar al Canarias luego de realizada la compra. ¿El objetivo? Robar el dinero de los ahorristas, movilizando los fondos de un lado para otro para despistar los controles de la Sudeban.
La Casa de Bolsa U21, propiedad de Álvaro Gorrín Ramos, fue la encargada de realizar estas transacciones fraudulentas. Según un documento oficial del Tribunal Supremo de Justicia, Eligio y su combo perpetraron un daño a la nación por el orden de los 200 millones de dólares mediante estos manejos mafiosos en el ámbito financiero.

"El turco" Mezerhane

En febrero del año 2010 Sudeban ordenó la intervención del Banco Federal por presentar una grave insolvencia en cuanto a sus activos líquidos. En dos semanas y media el 45% de los depósitos desaparecieron, lo cual prendió las alarmas del BCV.
Mezerhane ya estaba en Estados Unidos cuando fue dictada su orden de captura y en consecuencia ya se había llevado una buena cantidad de dinero después de la quiebra aplicada a fuego lento duramente meses. La estafa dilapidó los ahorros de 550 mil personas.
"El turco" también era el dueño principal de la inmobiliaria Century 21 y del canal Globovisión. Ostentaba más de 250 empresas (muchas de ellas de maletín) con las cuales logró fugar del país mil 600 millones de dólares.
Los churupos de Carla Angola, Roland Carreño y Kiko Bautista también se los embolsilló. Los trabajadores del canal quedaron a su suerte luego de la fuga. Qué ironía, luego de trabajar arduamente para tumbar al Gobierno, fue el Gobierno quien reconoció la deuda y pagó los ahorritos que el Mezerhane se llevó a Miami.

Los "extras"

El mando directivo que ejecutó la quiebra de los bancos antes mencionados también escapó con el maletín y los bolsillos llenos. José Omar Contreras, Gustavo José Mancera, Ana Isabel Hernández, Solange Elene Vaamonde, Jesús Alberto Riera, César Simón Berrizbeitia, Miguel Luis Naranjo y Pedro Torres Ciliberto. Todos ellos responsables de estafa a la nación por sumas milmillonarias.
La lista asciende a 23 banqueros (y directivos) fugados que radican actualmente en Miami.
Los que no pudieron escapar: Arné Chacón y Ricardo Berruecos. A este último (importante accionista del Canarias) se le acusa de comprar activos sobregirados por la cantidad de 283 millones de dólares para beneficiar al Banpro de Eligio Cedeño. Ya sabemos quién se quedó con el dinero robado, reinvertido en la guerra contra Venezuela. 

Caso reciente

Al inicio de este mes autoridades judiciales de República Dominicana solicitaron orden de captura internacional para los banqueros José Luis Santoro, Gabriel Jiménez Aray y Daniel Santoro, responsables de la quiebra del Banco Peravia radicado en dicho país. Se les acusa de lavar activos por el monto de 30 millones de dólares.
Los estafadores mezclaron el saqueo de divisas a través del extinto Sitme, la especulación financiera a la hora de entregar créditos para inversores dominicanos y la expansión de los activos líquidos sin un origen demostrable. Al saber que las autoridades dominicanas conocían del chanchullo, en los meses de octubre y noviembre viajaron hacia Estados Unidos para no volver más.

El desfalco a la nación también se aplica desde afuera.

Punto y seguido

Sume todos los casos que hemos detallado aquí y verá que el saqueo perpetrado contra el país supera con creces los 2 mil millones de dólares.
Hoy estos banqueros prófugos representan un fuerte aliado del lobby mayamero (pues la mayoría vive en Miami en cuerpo y alma). Eligio Cedeño, Mezerhane y los demás "extras" han aportado sus malhabidos recursos para financiar las guarimbas, los planes de desestabilización y hasta los intentos de magnicidio.
Como ese escenario reposa en el congelador, la estrategia de calentar la arremetida contra el país por parte de estos delincuentes encuentra piso en el proyecto de sanciones desarrollado por Marco Rubio, Ileana Ros-Lehtinen y Robert Menéndez, principales protagonistas de la escalada diplomática, económica y financiera contra Venezuela.
Después de la audiencia en el Senado norteamericano del día de ayer, el eje con el cual actuará el lobby mayamero (y en consecuencia los banqueros prófugos) quedó clarificado: montar un escenario de "corrupción gubernamental" desatada que "atenta" contra la "seguridad" del hemisferio.
Declaraciones como éstas reflejan, una vez más, el doble rasero con el que actúa la política exterior estadounidense hacia Venezuela. Las amenazas de congelar cuentas e inversiones de Venezuela pierden toda credibilidad ante el mundo, pues ellos no han tocado ni un dólar de todo lo que se llevaron los banqueros prófugos de Venezuela.

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