La ‘Calle Colombia’, San cristobal Estado Tachira un taller a cielo abierto

VIDAS

Wilson, uno de los más experimentados mecánicos de la ‘Calle Colombia’, sostuvo que todos los días hay clientes que desde muy temprano están esperándolos para que les reparen su vehículo. La jornada empieza a las 8:00 de la mañana pero puede extenderse hasta horas de la noche.

Los sábados por la tarde, los domingos y feriados son los días que más demanda tienen los mecánicos colombianos en San Cristóbal.

Muchos de los mecánicos antiguos en la ‘Calle Colombia’ les han dejado el lugar a los más jóvenes que atienden la clientela todos los días.

La parroquia La Concordia, la más extensa y poblada de San Cristóbal, se caracteriza por ser de las zonas más comerciales de la capital tachirense. En el sector está el mayor número de almacenes de repuestos y accesorios para vehículos. Nadie que tenga cierta prisa va hacia otro lugar a buscar una manguera, unas bujías o una pastilla para frenos.

Por esta razón, una muy buena parte de los talleres de mecánica automotriz se encuentran en ese sector. Allí se puede encontrar todo tipo de especialistas ya sea en motores, hidromáticos, aires acondicionados o electricidad para vehículos.

Sin embargo, desde hace medio siglo, una calle en particular –donde mecánicos callejeros están en disposición de reparar cualquier avería en los carros– tiene mucho movimiento.

Se trata de la calle Colombia, ubicada en la carrera Sexta de La Concordia, bautizada así por la cantidad de mecánicos colombianos que por allí se encuentran. Con el tiempo se le llamó ‘La Playa’, pero los colombianos siguen siendo los mecánicos del lugar, como lo señaló Luis, quien se identificó como venezolano hijo de padre colombiano, ya retirado por su edad de la actividad automotriz.

“Aquí no podemos comprometernos al arreglo de un vehículo que dure más de un día porque no tenemos en donde guardarlo. Nosotros hacemos todo tipo de arreglos e incluso podemos ir a desvarar a un conductor al que se le haya descachado el vehículo”, dijo Raúl Caicedo, un caleño que tiene más de 20 años en el lugar.

Wilson, otro de los  mecánicos colombianos, mientras repara el carburador de una camioneta cuenta que en la ‘Calle Colombia’ la jornada empieza desde muy temprano, “ya a las 8:00 de la mañana hay quien nos espera para que le pongamos el vehículo en marcha y la jornada se prolonga hasta bien entrada la tarde”.

Conscientes de que la calidad en la atención de los clientes les garantiza más trabajo a futuro, acuerdan siempre cobrar lo justo, consigna que les ha traído buenos resultados.

Días feriados, la clave del éxito

La popularidad de estos mecánicos callejeros empezó cuando comenzaron a trabajar los días feriados. Cuando los primeros mecánicos del sector iniciaron su trabajo, la mayor parte de la clientela llegaba los sábados en la tarde, los domingos o los días festivos.

Muy pronto el cuento se fue regando: si se le daña el carro vaya a la ‘Calle Colombia’, que allí encuentra quien se lo arregla; pero no era una cuña radial, ni que alguien lo perifoneara desde un carro ambulante de propaganda. Fue el boca a boca de quienes ya habían recibido el servicio y les iba bien. Por eso empezaron a ganar reconocimiento.

Hoy hay unos muchachos igualmente responsables que, aun trabajando en talleres, se ven cortos en los ingresos y relevan a los fijos los fines de semana. “Uno ya quiere descansar el sábado en la tarde y el domingo, pero hay quienes están empezando y vienen a trabajar aquí”.

Andrés Martínez, un colombiano que vive en San Cristóbal, trabajó por 14 años en un taller organizado, pero sus ingresos no satisfacían plenamente sus necesidades. Fue a probar suerte en el sector sábados y domingos, y vio que el trabajo era mejor recompensado. “Renuncié y me vine a trabajar aquí. Yo hoy trabajo hasta el sábado a mediodía, pero gano dos o más veces que lo que obtenía anteriormente”, cuenta.

Actualmente, los mecánicos que trabajan en la ‘Calle Colombia’ recuerdan que sus primeros compatriotas, los que iniciaron la labor, tuvieron que superar inconvenientes con los vecinos que se quejaban porque no veían con buenos ojos este tipo de trabajo en plena vía pública.

“Ya están superados esos problemas porque ahora nuestros vecinos son almacenes de repuestos que nosotros usamos y entonces ellos nos necesitan. Además, las autoridades municipales se quedaron tranquilas porque se dieron cuenta de que nosotros no somos obstáculos en la vía y porque además somos gente de trabajo que con lo que ganamos levantamos nuestras familias”.

Hay quienes comentan que muchos de los mecánicos que llegan a la ‘Calle Colombia’ a trabajar son indocumentados. Sin embargo, ellos mismos lo desmienten señalando que su identificación está en regla y advirtiendo que nunca han tenido inconvenientes de ese tipo con la autoridad.

Algunos incluso señalan que en Venezuela encontraron las oportunidades que en Colombia eran escasas. Muchos de ellos ya tienen familia con hijos nacidos en el vecino país.

No están organizados ni tienen una asociación, pero todos se conocen y se ayudan a diario. Ya son más de veinte los mecánicos, en su gran mayoría colombianos, que en la ‘Calle Colombia’ reparan los autos de miles de tachirenses.

Si alguna vez sufre un desperfecto mecánico en su vehículo un sábado en la tarde, un domingo o día feriado, cuando los talleres organizados están de descanso, busque la carrera 6 de las calles 4 y 5 de La Concordia ‘Calle Colombia’ o ‘La Playa’, y un mecánico, muy probablemente colombiano, lo sacará del inconveniente.