Luis Manuel De Llano, vicepresidente de Relaciones Corporativas de
Farmatodo, declaró que la medida adoptada por la cadena de farmacias que
regula la compra de productos semanalmente, obedece al problema que
representan los bachaqueros o revendedores para los clientes. De Llano y
la gerente de comunicaciones de la empresa, Johanna Rodríguez,
respondieron algunas preguntas sobre este racionamiento.
¿Por qué tomaron esta medida?
Nos vimos obligados porque eran más los que compraban para revender.
Hicimos un estudio a través de Datanálisis, en una muestra
representativa de nuestras tiendas y encontramos que 70% de los que
hacían colas o compraban eran revendedores. Ya no podíamos seguir
desatendiendo a nuestros verdaderos clientes. En un momento nos
convertimos en los mantenedores de los bachaqueros.
Entonces pagan justos por pecadores…
Lamentablemente es así. Aunque ahora los clientes reales se verán
beneficiados porque encontrarán los productos que antes los bachaqueros
compraban para revender por un precio hasta cinco veces mayor.
Quizás ahora encontrarán el producto, pero no en la cantidad que quieren o necesitan…
Creemos que de esa forma estamos protegiendo a nuestros clientes. Al
menos podrán conseguir algo del producto que necesitan, antes no lo
conseguían. Además, las cantidades que proponemos alcanzan para una
familia promedio venezolana. Lamentamos vernos en esta situación.
¿Por qué sumarse a la campaña de racionamiento que propone el Gobierno?
No nos estamos sumando a la campaña de racionamiento. Lo que queremos
es beneficiar a nuestros clientes y que consigan los productos.
¿Qué hicieron antes de llegar a este punto?
Tomamos varias medidas antes de la actual. Primero hicimos el estudio
con Datanálisis para determinar quiénes eran esos revendedores. Luego
cambiamos los horarios de los camiones, porque los bachaqueros ya sabían
exactamente los horarios. Eso no funcionó, porque se apostaban en las
tiendas todo el día esperando los camiones, incluso dormían ahí. También
intentamos evitar que compraran al poner los productos detrás de la
caja. Sin embargo, no fue suficiente. También hemos solicitado apoyo de
la Guardia Nacional para mantener el orden.
Si están tan identificados los bachaqueros, ¿por qué no perseguirlos?
Eso ya no nos corresponde. Hemos solicitado y obtenido ayuda de
policías locales, pero realmente no podemos ir más allá. Son gente
agresiva. Quienes más sufren son nuestros empleados que lidian con ellos
diariamente, reciben amenazas, insultos y agresiones. Con esta medida
nuestros empleados se protegen porque el sistema no les permite vender
más del límite establecido.
¿Es un sistema de captahuellas?
No, es un software que identifica al comprador con su cédula en la
caja del establecimiento y no le permite comprar más de la cantidad
permitida a la semana. La semana se cuenta de lunes a domingo, es decir,
si usted compra un producto el sábado, puede volver a comprarlo el
lunes siguiente.
¿Le han pedido al Gobierno que haga algo para resolver la situación?
El Gobierno sabe el problema que existe con los revendedores. Solo
podemos actuar sobre lo que está a nuestro alcance. Queremos lo mejor
para el cliente.
¿Cómo han reaccionado los clientes?
La respuesta que hemos obtenido es positiva. Los clientes
dicen que ahora sí consiguen los productos aunque en esa cantidad
limitada. Ahora los productos básicos y de higiene, duran más en los
anaqueles y todos pueden obtenerlos. Esperamos que los clientes
entiendan la medida. Seguimos estando allí para servirles, los
revendedores no nos dejaban hacerlo, pero esperamos lograrlo con esta
medida.
¿Y hasta cuándo es esta medida?
Eso es algo que no te podemos responder, porque la solución no está en nuestras manos.
Fuente: Runrunes
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